
La medida contra Darío Cáceres se tomó luego de la filtración de un amenazante audio que expuso negocios millonarios de La Fiel. Fue trasladado a Ezeiza.
Esta semana estalló un escándalo que tiene como epicentro a la barrabrava de Talleres. Ocurrió luego de la filtración de un violento audio de su jefe, Darío Cáceres, desde Bouwer, que expuso negocios millonarios de La Fiel.
La noticia se volvió nacional y tal es así que este viernes la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, mostró las primeras imágenes del traslado de Cáceres al módulo de máxima seguridad del penal de Ezeiza.
“¡De una cárcel común a una de máxima seguridad! El peligrosísimo narco cordobés, líder de la barra de Talleres y condenado por traficar 1500 kilos de droga, se quedó sin privilegios. El SPF y la PFA lo trasladaron en un importante operativo. Con nosotros, ley y orden", escribió la funcionaria en su cuenta de Twitter junto a las fotos del procedimiento.
El audio del jefe de La Fiel obligó a las autoridades del Servicio Penitenciario de Córdoba a tomar medidas al respecto. Primero allanaron su celda y luego ordenaron el traslado al penal de Ezeiza, en Buenos Aires.
Cabe recordar que en noviembre de 2023 el líder de la barrabrava del Matador fue condenado a ocho años y medio de prisión por dirigir una banda narco. La organización delictiva fue desbaratada en febrero de 2022, momento desde el cual Cáceres se encuentra detenido.
El audio del escándalo
En un mensaje de voz de 15 minutos Cáceres lanzó amenazas explícitas contra otros integrantes de la barra de la T, indicando que él es quien manda y subrayando su larga trayectoria delictiva. “Lo voy a matar, les voy a volar la cabeza. Yo los hice millonarios. Yo manejo una barra hace 20 años, a mi me conocen todos”, dijo en uno de los fragmentos.
“No te hagas el vivo. Robábamos juntos. Caíste con una carreta, ahora tenés siete colectivos gracias a Dios. Vos me querés picar a mí. Querés llamar a tu patrón, llámalo. Yo soy el jefe, el jefe soy yo. Que me querés romper la estructura", agregó también.
El audio de Cáceres no solo salpicó a La Fiel y al club de barrio Jardín sino que también exhibió un complejo entramado de negocios que vincula al fútbol, los sindicatos, la política y las mafias.